OBJETIVO 2014, ¡ESTE AÑO SÍ!

¿Alguna vez habéis llegado a cumplir la enorme lista, que cada año nos hacemos en nuestra cabeza, con los propósitos de año nuevo? A veces, hasta nos atrevemos a nombrarlos en voz alta, ¡mal! Eso sólo sirve para que el resto se encargue de recordárnoslos durante el año. Como todos os imagináis cumplir los propósitos que nos hacemos no es tarea fácil pero ¿os habéis preguntado por qué?

Cambiar muchas cosas a la vez en nuestra vida, sin previa organización, es casi imposible. Pensar en nosotros como en la construcción de una casa, imaginad que tenemos 4 pilares y de repente nos da por cambiar los 4 a la vez, la casa se nos caería encima; a no ser que pusiéramos puntales y para eso necesitamos organización. Pero ¿cuántos de nosotros, a parte de la lista de propósitos, hacemos la lista de cómo llevarlos a cabo? Hace falta un plan muy complejo casi imposible para que no nos desmoronemos y dejemos los cuatro pilares tal como están año tras año.

Por eso, busca un objetivo fácil, uno que puedas cambiar y cumplir casi sin esfuerzo y márcalo como el primero del año. No puede ser un objetivo como, dejar de fumar, ponerse a dieta, etc. serán más objetivos del estilo fumar menos, especificando la cantidad, comer mejor, añadiendo los alimentos nuevos y los que ya no podamos ingerir, etc. El truco está en la manera en la que nombramos nuestros nuevos objetivos. No es cuestión de engañarnos sino de ser realistas con nosotros mismos, de proponernos un cambio y lograrlo a lo largo del nuevo 2014 y no la primera semana para dejarlo antes de que termine enero. Si nos acostumbramos a fumar una cajetilla de tabaco diaria durante un mes, o el tiempo que sea necesario para no sentir ansiedad, luego pasamos a fumar 15 cigarrillos, más adelante 10, etc. acabaremos dejándolo gracias a nuestro esfuerzo y perseverancia y de paso estaremos cumpliendo uno de los objetivos marcados de año nuevo.

El sentimiento de satisfacción que percibimos cuando, gracias a nuestro esfuerzo, logramos metas hace que aumente nuestra autoestima, seguridad y confianza. Y esto hará que nos lancemos a gritar en voz alta cualquier objetivo el 31 de diciembre de 2014 porque, por primera vez, habremos cumplido nuestros objetivos y sabremos que ¡sí podemos conseguir lo que nos propongamos!